Sobre Demo 2021 por Santa Sangre
El tiempo es una cosa cagada, algunas cosas cambian sin que te des cuenta, otras regresan de maneras inesperadas, y están aquellas que simplemente permanecen porque no todo puede ser tan malo. Lo digo porque hace diez años yo creo que nadie se imaginaba que el stoner, of all genres, iba a tener la notoriedad que tiene hoy en la onda subterránea de México y el mundo. Y eso que ya mucha banda estaba escuchando a Sleep, Electric Wizard, Fu Manchu… en aquellos entonces.
Santa Sangre son de Mérida, y hacen stoner rock (que no metal) desparpajado y ruidoso. Es rock ácido sin complejidades ni intelectualismos, no es que tengan algo de malo tales cosas. Pero lo de Santa Sangre es más garageoso desmadroso: se escucha que el guitarro, Antonio Echazarreta, forma parte de la antigua sociedad que rinde culto al fuzz. El bajo de Mario Mendoza, también vocalista, va grueso y contundente, con un tono mitad metaloso/mitad ponchado. La batería suena con pocos micros encima, a cargo de Fando Praga, pero es de tepalcatazos precisos y agresivos. Me parece que influencias clave son Electric Wizard, Weedeater, Acid King, Bongzilla y Truckfighters.
Punto de vista: cuando los municipales van a ver qué es ese humo del otro lado del Río Lagartos.
“Bufo Alvarius” empieza con un groove rugiente y el contratiempo marcando el compás, para devenir en una marcha sludge gargantuesca sacude mata. El bombo al principio de “Vendiendo Droga” suena a tinaco vacío, sólo para dar pie a un viajesote de overdrive/feedback, como un Earthless anti-jipi en el garage. Gripa Colombiana es mi track favorito, empieza con la lira echando el riff (el mejor en todo el demo, por cierto) con el fuzz a todo. Pronto se hace un stoner rock contundente con la entrada del bajo y la batería de sopetón, a-lá Sonic Titan. También es la rola en el que el estilo vocal de Mario Mendoza queda mejor: no tan de hechicero pero sí de valedor desmadroso. Por su parte, entiendo la importancia que coverear “Snowblind” puede tener para una banda de stoner. No es que no les salga chido, pero sus temas propias están mucho mejor la verdad.
La portada me recuerda a las que hacen las bandas de stoner argentino como Mephistofeles, que comparten esta onda más completamente hedonista/decadentista; sin influencias literarias, quizá algo cinematográficas (su nombre hace referencia a Jodorowsky, supongo) y tiradas al pedo legalize drugs and murder. En conclusión, Santa Sangre hace buena música pa’ fumarse unos porros y echarse una wamas.